Plena y tranquila

Una persona sana, plena y completa es aquélla que no necesita de otro ser para sentirse feliz, quien busca a otro ser completo para compartirle su dicha y hacerle partícipe de sus planes y sueños. Sabe de antemano, que la dicha no se construye bajo la desgracia, ni es cobijada por la tristeza

Aquélla que conoce sus límites y sus temores

Aquélla que con humildad reconoce sus fortalezas y trabaja con sabiduría y constancia en sus debilidades para convertirse en mejor persona

Quien controla su cuerpo (aceptando que éste es solo el reflejo de su interior) a través de su mente… de su espíritu, meditando y reflexionando día con día sobre sus logros y sus avances, aprendiendo de sus derrotas; reconociendo sus miedos internos, generando con constancia firmeza y fortaleza, las cuales son frecuentemente saboteadas por quien quiere tener el poder y el control, nuestra vanidad y nuestro ego

Trabaja con amor auténtico y paz desde el fondo de su corazón, para dar felicidad a todos los que le rodean. Teniendo siempre honestidad, lealtad e integridad con el mundo pero sobre todo, consigo mismo
Ha aprendido a amar, sin poseer, a respetar sin condicionar. Porque tiene la capacidad de amar a un ser humano y no solamente a su conducta, condicionando así el sentimiento.

Porqué cuando quieres una sola duda destruye tu horizonte, y cuando amas… ni cien verdades serán suficientes

Quién no juzga, pero si analiza y piensa para contribuir a construir un mundo mejor, empezando por sí mismo y su pequeño entorno

Porque jamás encontrarás a tu alrrededor ... lo que no está dentro de tí mismo

PORQUE LO QUE SANA A UNO ... SANARÁ A TODOS, ASI TAMBIÉN LO QUE DAÑA A UNO ... DAÑARÁ A TODOS